Praia de Hucha. Arteixo, A Coruña. |
Después de que se haya puesto el sol quedan aún unos minutos en los que aún se percibe el reflejo del mismo sobre el horizonte, mientras la oscuridad se adueña de la playa. En verano esto es más visible aunque según se acortan los días cada vez es un efecto más tenue. En esos momentos es posible realizar largas exposiciones no muy prolongadas, como esta de tan solo treinta segundos, en las que la cámara capta a la perfección la belleza del instante. Pena que no pueda captar también el hermoso rumor del océano y las gaviotas.